AMISTAD, OTRO TIPO DE AMOR

"Muchas veces no estamos de acuerdo y llegamos a discutir por las cosas más bobas, solemos reír a carcajadas y burlarnos de cualquier tontería, podemos pasar horas hablando o solo acompañarnos sin decir nada, porque solo basta mirarnos para saber qué ocurre y qué necesitamos… ¿sabes algo? No elegiría a nadie más para hacer todo eso, porque en todos esos momentos -buenos y no tan buenos- sé que te quiero a mi lado…”

Todos tenemos a alguien que se ha convertido en pieza clave de nuestra vida -o eso creo yo-, esa persona a la que queremos contarle todo tan pronto ocurre, ese ser que -no importa que tan mal vaya el día- siempre tiene un comentario atinado para sacarnos una sonrisa y que con unas palabras de aliento nos hacen sentir que todo va a mejorar.

¿Quién sería esa persona para ti? Ok, pausa aquí… en esta ocasión quiero que pienses más allá y no únicamente en tu pareja –que va, eres afortunado si tu pareja es tu mejor amigo- sino quiero que pienses en ese amigo con el que compartes cada parte de tu vida de una forma tan honesta y sincera que no necesitas disfrazar ni disimular nada, sólo necesitas ser tú.

Existen tantas clases de amor que no podemos enfocarnos exclusivamente en el que proviene de una pareja. Nos rodeamos de tantas personas cada día que en ocasiones hay ‘extraños’ que llegan a ser amigos y que con el tiempo se convierten en familia, se les llega a querer tanto que es un tipo de amor, confianza y respeto diferente, no mejor o peor que el amor de pareja… sólo distinto.

En mi caso, puedo decirte que soy afortunada porque en la vida me he encontrado con personas que me han acompañado en todo momento, que han reído y llorado conmigo, que han disfrutado de mis éxitos como yo de los suyos y, sobre todo, tengo la fortuna de tener desde mi día uno de vida a mi mejor amiga y fiel compañera de aventuras: mi hermana.

Desde que tengo memoria ella es la persona que siempre ha estado ahí para mí, sin importar nada, que siempre tiene el comentario justo para molestarme o para hacerme reaccionar cuando no estoy haciendo las cosas y la mayoría de las veces ese comentario que logra hacerme botar de la risa con las ocurrencias que dice y con tantas canciones que se inventa… aunque esas sí me desesperan un poco jajaja.

En esta ocasión cuando hablo de ella no lo hago para referirme a esa persona con la que comparto un lazo de sangre, sino a una de mis mejores amiga y les cuento que la verdad nuestra relación no es perfecta, somos tan normales que peleamos por las cosas más absurdas -porque las dos somos necias- y también es cierto que a pesar de las discusiones al final del día nos gana algo: nuestro amor (en cursi yo jajaja).

Así que quiero que pienses en quién es esa persona o personas con las que has pasado por ciertas experiencias, por risas o incluso por lágrimas, pero que han sido momentos tan valiosos que no podrías comparar con nada… te lo pido porque debemos aprender a reconocerlas y a valorarlas, para no dejarlas ir.

Creo que a veces las amistades pueden ser un poco más complicadas que una relación de pareja… porque justo en las amistades tienen una línea delgada entre que las personas tengas similitudes y gustos parecidos a ser iguales. Vamos, ni yo con mi hermana soy igual jaja tenemos muchos gustos en común, incluso cuando vamos a comprar ropa cada quien se va por su lado y regresamos con cosas iguales o similares… pero somos distintas y la forma en cómo reaccionamos ante no es la misma, creo que ahí es donde radica la riqueza de una amistad.

Sí, ahí es donde radica porque creo que una verdadera amistad se basa en decir las cosas tal cual se piensan… ok, con algo de tacto jajaja. No sé ustedes, pero yo prefiero mil veces una amistad que me dé una opinión sincera, una opinión objetiva o una opinión que me aporte sobre cualquier amistad en la que finjan escucharme y digan estar de acuerdo solo para cambiar de tema…

Las amistades son un tipo de relación que también requieren compromiso, respeto y tiempo… sí, se requiere que existan esas ganas por seguir compartiendo y haciendo cosas. Aunque en esta etapa de la vida adulta tal vez se dificulte y no sea tan fácil verse, debe existir al menos ese interés de seguir pendiente de la vida de la otra persona y al igual que en una relación de pareja… esto es recíproco.

Además, por supuesto que también en este tipo de relación se sufre de desamor… porque hay amistades que no son para siempre y de ellas también debemos aprender. Hay personas que llegan de formas inesperadas, otras que se van cuando ven que las cosas se ponen difíciles y hay personas que cuando te das cuenta han estado contigo en las buenas y en las malas… y esas, esas amigo mío son las que no debes dejar ir.

En la amistad es igual que en el amor de pareja, debes estar dispuesto a dar lo que estas dispuesto a recibir, porque no puedes exigirle a la otra persona que haga más de lo que tu estarías dispuesto a hacer por ella. En mi vida he tenido también desamores en las amistades, pero hoy puedo decirles que todo me ha servido para tener a mi lado a las personas indicadas como amigos.

Hoy terminaré preguntándote ¿cuándo fue la última vez que hablaste con tu amigo? Si no lo has hecho, nunca es tarde y haz esa llamada o manda ese mensaje para desear un lindo día y dile a esa persona cuánto la quieres y cuán importante es para ti su amistad.