top of page
Buscar

"YO, A TÚ EDAD..."

  • Foto del escritor: Kenia Arteaga
    Kenia Arteaga
  • 31 ago 2018
  • 4 Min. de lectura

Actualizado: 24 sept 2018

Esa es una frase que he escuchado una infinidad de veces a lo largo de mi vida, aunque posiblemente durante los últimos años le he prestado más atención. No, no lo digo a modo de queja -¡se los juro!- porque me alegra que las personas compartan conmigo aquellos logros de los cuales se sienten orgullosos, que me cuenten las travesías y obstáculos que tuvieron que enfrentar para poder lograrlos y, de verdad, al escuchar la felicidad con la que me platican comparto ese sentimiento. Sin embargo, es una frase que también me llega a provocar bastante ansiedad y que ha hecho que en los últimos meses me pregunte muchas veces: "y yo, ¿qué he hecho yo de mi vida?"



¿Por qué creen que eso pasó últimamente? Porque soy una exagerada jajaja... estoy a unos días de que sea mi cumpleaños y este año -por primera vez- comencé a sentir "la crisis de la edad" y no precisamente por "la edad" -¡Vamos! Aún soy una chicuela, un poco achacosa... sí, pero joven y bella jajaja- sino porque sentía que el tiempo pasaba volando, que aún me hacía falta mucho por hacer, que no estaba cerca de mis metas y, básicamente, me comenzaba a desesperar...


Además, este año al hacer una recapitulación de lo que he vivido y he logrado creo que me di cuenta que aquel "plan de vida perfecto y exacto" que tenía de pequeña era algo que se había desfasado por algunos años. Cuando era niña -8 o 9 años- tenía la siguiente idea: a los 21 años terminaría la universidad, a los 23 años -máximo- estaría titulada y con un trabajo estable (que obviamente iba a amar), a los 25 años estaría viajando y disfrutando de la vida, así a los 28 años -con el novio que tendría en la universidad- me casaría y cuando cumpliera 30 años iba a tener a mi primer hijo (a)... ¿Que lindo! y, ¿ustedes creen qué así ha pasado? Pues, ¡NO! jaja


Les cuento que mi carrera recién la terminé el año pasado -a mis 24-, que estoy a punto de cumplir 26 años y aún no me he titulado, que por el momento no tengo un trabajo estable y no me encuentro viajando como lo imaginé, en cuanto al novio de la universidad con el que me planeaba casar y tener hijos... sólo diré que estoy soltera jaja ¡SUCH IS LIFE! Aunque hay algo que si he hecho de mi plan de niña y que no limité a una edad -lo cual creo que todos deberían hacer- que es DISFRUTAR DE LA VIDA.



Y, ¿saben algo? Creo que si hoy tuviera que hablarle a esa niña que tenía un "timing" marcado le diría que se relaje, que todo se acomoda y que los tiempos siempre son perfectos para que pasen las cosas... aclarando, por supuesto, que no todo depende de la "suerte", que debe trabajar para lograr lo que quiere y no desesperarse. ¿Tú que le dirías a tu "mini me"?

Ustedes podrían pensar que lo digo tranquila, pero en realidad es algo que me costó trabajo entender y algo en lo que sigo trabajando. Uno de los peores errores que estaba cometiendo -y por el cual me estado cuestionando tanto qué había hecho de mi vida- era comparar mi vida con la de los demás. Como les decía al inicio, es bien lindo escuchar anécdotas que van acompañadas de la frase "yo, a tú edad", suenan a frases motivaciones jaja; pero, creo que debemos de tener claro que todas las personas somos diferentes, que lo que le haya funcionado a otros no necesariamente es lo que me puede funcionar a mi, que todos tenemos ritmos distintos, que todos vamos a nuestro propio paso y que eso no nos hace menos ni más que los demás, nos hace ÚNICOS.


La "crisis de la edad" es algo que le puede pasar a cualquier persona, a cualquier edad y en cualquier momento, porque todos nos hemos cuestionado lo que hacemos, hemos replanteado nuestra vida y nuestros planes. En lo personal, considero que las crisis -de cualquier tipo- no debemos verlas como una oportunidad para "tirarnos al drama", ni de "pobretearnos", ni de "sentir lástima" por nosotros si las cosas no están resultando cómo queremos; por el contrario, debemos verlas como una oportunidad de hacer ajustes a nuestra vida, de replantearnos acerca de lo que estamos haciendo, si es o no lo indicado para conseguir nuestras metas y, sobre todo, de fijarnos nuevos planes.


"Y yo, ¿qué he hecho yo de mi vida?" Ahora entiendo que he hecho mucho... a mi edad he hecho lo que he querido como he querido y cuando he querido; a mi edad he reído, he llorado, he disfrutado... he vivido; a mi edad sé que me falta mucho camino por andar y estoy emocionada por recorrerlo; a mi edad sé que me falta aprender muchas cosas, seguir creciendo y cumplir muchas metas. Creo que lo importante es que cada uno de nosotros nos demos una gran dosis de amor del bueno en la que nos enorgullezcamos de nuestros logros, que reconozcamos nuestras hazañas y que comencemos a disfrutar nuestra vida sin preocuparnos por lo que los demás han hecho con la suya.


Lo importante de vivir es -justamente- vivir nuestra vida, la de nadie más y hacer aquello que nos guste y nos haga sonreír, que nos haga felices. Por eso, decidí que este año -y todos los que vengan- tendría como mantra que: "¡la vida pasa, el tiempo no te espera y no puedo permitirme el no ser feliz!" Así que ¡a disfrutar todos los días y a cada momento!


Comments


Llevemos esto al siguiente nivel, ¿gustas?

¡No te pierdas ninguna publicación!

  • Blanco Icono Pinterest

©2018 BY KENIA ARTEAGA

bottom of page